José G. Mendoza Muñoz

Pastor Iglesia Cristina de Aruba

Egresado Programa de Teología a Distancia (2015)

Especialista en  Cuidado Psicoespiritual, promoción 2017

¿Cuéntenos un poco de su trayectoria profesional después de graduarse de la UNIBAUTISTA?

Después de terminar mi grado como Teólogo en diciembre de 2015 y finalizar la Especialización en Cuidado Psicoespiritual en diciembre de 2017, he estado plantando una congregación en la isla de Aruba, donde resido desde 2010. Junto a mi esposa Katy estábamos listos para abandonar la isla confiando y orando para que el Señor nos dirigiera a donde Él quería que fuésemos y sirviésemos en la extensión de su evangelio. Y fue en el mes de octubre del 2015, en un intensivo presencial en la UNIBAUTISTA, donde Dios uso ese tiempo los profesores y la palabra para alumbrar nuestro camino, haciéndonos entender que era precisamente Aruba, el lugar donde podíamos servirle, tomándonos de las palabras de Dios dadas al apóstol Pablo; “porque yo tengo mucho pueblo en esta ciudad” (Hch 18:10) . Así iniciamos ese mismo año, el 05 de noviembre, un mes antes del grado como teólogo, nuestro servicio al Señor, de forma bi-vocacional, hasta el mes de octubre de 2019, donde desde entonces estamos dedicados a tiempo completo al servicio del Señor.

¿Cómo ha vivido este tiempo de pandemia y de qué forma considera que ha podido ser luz y sal en su contexto en este tiempo?

Desde una integralidad de la fe en cumplimiento con las palabras del Señor Jesús cuando dijo; “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas acciones y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt 5:16), desde la cátedra de conducta y fe de las bienaventuranzas en el sermón del monte, que se ocupa integralmente del individuo, estableciendo una liturgia que va desde la observancia de las disciplinas de la fe (orar, leer la escritura, congregarnos), experiencias que son inseparables, del llorar con los que lloran (humanizar el luto, aun cuando este es de un hermano en la fe, “Y algunos hombres piadosos sepultaron a Esteban, y lloraron a gran voz por él”(Hch 8:2), pacificando, recibiendo y procurando la misericordia. Haciendo así posible un cristianismo que nos reconoce humanos y no divinos.

Una reflexión que desee compartirnos relacionada con su experiencia en este último año.

Como iglesia en Latinoamérica y el Caribe, se hace necesario deshumanizar a Dios (verle como otro igual a nosotros) y desdivinizar al hombre (intentando ocupar el lugar de Dios). Un sector importante de la iglesia en américa latina, urge y requiere volver a las escrituras. Se apremia de hombres de las escrituras. Las cinco solas del reformador Lutero deben volver a nuestras familias, nuestras casas, comunidades, y edificios de reunión cultico. Tenemos una deuda con la generación presente, por la escasez de hombres bíblicos desde el liderazgo y la enseñanza; donde la escritura tiene preminencia sobre lo experiencial. Necesitamos ser bíblicos en lo privado, luego en lo familiar y posteriormente en lo público, resultando así en lo práctico, manejando con precisión la palabra de verdad (Tim. 2:15) que resulta en un cristianismo auténtico desde casa, como padres, como esposos, como hijos, como líderes cristianos. No somos los actores que movemos los hilos del mundo, aunque algunos han pretendido serlo. Esta pandemia revela que vamos de bruces hacia el fracaso al pretender desdivinizar a Dios, ordenándole que hacer y qué no hacer, desconociendo lo más básico y elemental de sus atributos, como es su soberanía y providencia, por la ocupación vana en divinizar al hombre desde los círculos de la fe. Conduciendo más y más a la impiedad, al no evitar las palabrerías vanas y profanas (Tim. 2:16) en la novia del cordero (la iglesia compuesta por los creyentes en Cristo), exaltando el ego y el culto a la personalidad trastornando la fe de algunos. Por la falta de predicadores comprometidos con el estudio sistematizado de las escrituras, haciéndonos seguidores de las escrituras, impidiendo así que esta sea sierva de la sociedad.

¿Por qué recomienda a otras personas estudiar en la UNIBAUTISTA?

Recomiendo la UNIBAUTISTA, por el nivel académico teológico-critico de los profesores que dictan los diferentes cursos, tanto nacionales como internacionales. Por la infraestructura que goza de un espacio propio para estudiar internado así como a distancia a través de su plataforma virtual. Por la preparación teológica permite tener una mirada crítica, bíblica y por lo tanto Cristocéntrica.

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